Tilin..

Navidad bonita, navidad cálida,navidad navidad tilin tilon...

Todos tenemos buenos y malos despertares, en este caso yo estoy en un termino medio...

La navidad siempre me recuerda a mi infancia... pasaba maravillosas navidades acogida de mi familia, buscando el mejor vestido de la ultima temporada para estrenarlo el día de noche buena, algunos venían de otras ciudades para celebrarlo en  mi hogar,  muchas veces compartíamos mesa con amigos y conocidos que poco había visto, pero que siempre hacían de la cena algo interesante.

La típica llamada a la abuela, "Vístete que vienes a pasar la noche de navidad" y la típica respuesta de la abuela "Me quedo en casa" entre la polémica y la indignación de mi madre, pasaban horas y horas de las cuales no sabíamos si la abuela de verdad vendría a casa... ( Aunque al final cediera  a tantas rogatorias). Todo pasaba tan rápido, era todo movimiento, gente que entraba, salia... compras,compras y mas compras...

Dreamy photos by Julie de Waroquier

Observando todo y resbalándome por toda la casa con las típicas medias que jamas me quitaba, patinaba, incluso recuerdo dos puntos en mi cabeza... por culpa de un golpe con la puerta de mi habitación. Venia un decorador un poco visco y con la cara un poco desfigurada... mi madre siempre apuntaba."Son tantas cirugías plásticas" pero siempre reseñaba el buen decorador que era... era cierto yo me quedaba tirada en el sofá viendo a dicho personaje arreglar a tan enorme árbol  tenia un maravilloso gusto, al terminar y al encender la luces del árbol ..  yo me quedaba hipnotizada detallando cada uno de sus adornos y el reflejo que este daba a todo el salón.. Era una buena sensación navideña.

Al llegar la noche la canija de pelo rizado iba corriendo a la habitación de su padre y la posición frente a su cama siempre era la misma "Que tal estoy" , él siempre con una sonrisa "daba su opinión sincera respecto al vestuario que en su mayoría era de su agrado", él era el ultimo en levantarse, siempre apoyaba la comodidad y la autenticidad descansaba lo suficiente, se vestía con tranquilidad y en lo que salia de la habitación me guiñaba el ojo eso significaba que la mesa de quesos ya estaba a nuestra disposición una de las aficiones que ambos compartíamos el amor a los buenos quesos, nos sentábamos a la mesa como cualquier familia... el tema de conversación no era más que las aventuras y los chistes de una vida llena de acontecimientos la mi padre con sesenta y tantos años...

Llegaba la hora de los regalos, algunas veces ya estaba dormida al terminar la cena y otras aguantaba a los regalos, al despertarme ya era el día 25 maravilloso y lleno de paz abría mis regalos siempre muy satisfecha... (Navidad como la de muchos o como la de pocos..)

Ahora  después de unos cuantos años, del que mi padre decidió partir a su transición espiritual, estas fechas siempre lo recuerdo con un sentimiento de alegría y de nostalgia...

Hoy es navidad y  en mi hogar no hay tanto movimiento solo se escucha a mi hermosa Greta (Mi gata) jugar con una bambalina que ella misma con mucha delicadeza quito del pequeño árbol de navidad... Arnau (Mi perro) esta plácidamente en su cama esperando que lo saque a la calle...y mi madre emocionada decorando unas velas para la cena de esta noche, en donde mi compañero aquel que me entiende, me escucha y comparte conmigo todo aquello que me inquieta nos deleitara con una cena de esas de las que a él le hacen tan especial...

Y esta es mi navidad, sin vanidad, sin opulencias...

Simplemente calurosa hogareña y estable..

Feliz Navidad para todos, para aquellos que todavía creen en ella y para los que no, que pasen una noche tranquila, llena de esperanzas y de reconciliación, no tanto con lo demás, sino con ustedes mismo.

aquellos aires...

Nunca olvidare el olor de esas tierras ni la suavidad de sus aires, de aquellos cielos que iluminaban todas las tardes la esperanza, del olor al café por la mañana. De esos pueblos que te hacían sentir que estabas en un verdadero paraíso....

Últimamente me niego a saber de esas tierras donde pase mi niñez y parte de mi adolescencia, esas tierras nobles que me obsequiaron atardeceres que nunca olvidare. Me siento defraudada, decepcionada e incluso avergonzada...

Muchos piensan que es un poco egoísta de mi parte el tener tal sentimiento y que mi derecho a  opinar se disminuye al vivir en otro país. Acarrear con aquello del " tu no vives aquí y poco puedes opinar" ya no me convence. No es mas que una demagogia de mal gusto.

Desde muy lejos me llegan llantos sin consuelo.

Desesperanzas  infinitas, donde la luz no se ve llegar..

Donde los míos han perdido la capacidad de sentir, sí sentir...

El desinterés que se vive ante tanta atrocidad, es aquello que me decepciona y  me asusta.

                            El viento nos susurro todo aquello que no queríamos escuchar...

   Nos comento sobre el egoísmo de los nuestros, de su falta de generosidad y comprensión ante aquellos más necesitados, de la  envidia que les corroe al ver lo bien que les va a los demás. Que más que una formación para un mejor futuro, el ciudadano cambio su  misión, ahora es es acumular más que el vecino, no importando de que manera, llevándose por en medio a sus coterraneos  y confrontando  hasta su propia  familia.
  Que el educarse a ellos mismos como buenos ciudadanos, se ha convertido en un chiste y ha pasado a un segundo plano, nos explica la falta de realismo y la poca sensibilidad hacia tanta violencia en donde la vida no vale nada. El juzgar a los demás por no seguir las directrices del sistema  que se respira  ya es algo natural, se sienten incluso "grandes" apoyando al tirano del país vecino y llevando por bandera al sanguinario "Che".

La mejor  forma de apoyar a Venezuela es darle la oportunidad a las nuevas generaciones con ideas frescas y productivas, educando, no seguir con el mismo reglón que el único resultado que traerá es  la continua  victoria del tirano. Lo primordial es la educación, como ciudadanos debemos luchar por los valores que hacen grande a una nación por la unión y la tolerancia, dejar esa competencia "chimba" y ridícula que lo que ha hecho es fomentar.la incapacidad del ciudadano y sus gobernante. Por un momento dejen de cultivar  su ego.

              

   La  honestidad de sus habitantes se ha convertido, en el lujo al que todos han renunciado...

Ahora mismo estáis llenos de riquezas, riquezas  que pronto se acabaran, todo eso se esfumara, de manera tal que no tengan mas en que pensar, que en  volver a reconstruir todo aquello que han destruido.

El problema no es la mala hierba que ustedes mismo sembraron, sino la esencia toxica que quedara si algún día se llega arrancar de sus tierras.

Nos despertamos de una pesadilla. Donde veíamos que nadie en realidad quería con humildad y sinceridad a tierras tan generosas, ni a sus amigos, ni a sus hermanos, ni a sus padres. Solo se aferraban a una ideología cutre que ya huele a podredumbre.

Solo unos ojos color café de un pequeño niño con piel de canela nos despertó todas las maravillas de un ser único nacido en tan bendecidas tierras, es una mezcla  de cacao y café con un aroma  tan dulce como nuestra caña de azúcar, que suplica tolerancia, unión y paz.
Los países son lo que son sus ciudadanos...

Los pueblos a veces se equivocan, y a menudo la pagan caro. Por regla general, los pueblos tienen los gobiernos que merecen tener, aunque luego se arrepientan. Mario Vargas Llosa.

Idiota no es cualquiera...

" El idiota se cree grande porque hay otros idiotas que lo aplauden. El idiota se cree tigre de acero. El idiota no sabe que el acero también se derrite "

 Sr. Director:

Se necesita vocación y entrenamiento. Sea cual sea el empaque. Porque hay varias clases de idiotas: los invisibles y los que encandilan. Los inoloros y los que apestan. Los insípidos y los que empalagan.

Hay idiotas con toga e idiotas con botas. Hay idiotas de reciente cosecha y los hay añejados. Hay idiotas por conveniencia y hay idiotas porr convicción. Todo idiota, sin embargo, tiene su equipamiento básico: una serie de rasgos peculiares que lo definen y lo separan del resto de la especie.

El idiota típico, por ejemplo, no distingue colores ni matices. Ve el mundo en blanco y negro. Alimenta su discurso con dicotomías. Pobres y ricos. Patriotas y lacayos del imperio. Buenos y malos. Capitalismo y socialismo. Bush y el otro.

El idiota practica el autoengaño. Cree que maneja a los demás… y los demás lo usan. Lo ponen, verbigracia, a dar insultos a un gringo en tierra ajena, mientras el anfitrión voltea su estrabismo para desentenderse.

O algún analfabeto presidente, le organiza un acto de adulación para vaciarle la bolsa mientras habla. El idiota no sabe lo que dice. Usa la lengua pero no el cerebro. Le rinde culto a la consigna. Llama a formar “uno, dos, tres Vietnam”, sin recordar el sufrimiento que un solo Vietnam le causó al mundo. O grita a todo gañote

“Patria, socialismo o muerte”, como opciones alternativas de futuro. Como una amenaza enarbolada a los cuatro vientos, que deja sin espacio a quienes creen en la humanidad, la libertad y la vida.

El idiota no sabe sacar cuentas. Se mira en el espejo y grita “¡Somos dos!”. El idiota, en efecto, asocia a su país con tres países pobres y pequeños… y cree que el imperio está temblando. Venezuela, Cuba, Bolivia y Nicaragua se embarcaron en esa aventurilla que es ALBA. Unidos suman unos 50 millones de habitantes. La mitad de los que tiene México. La cuarta parte de los de Brasil. La sexta parte de la población del imperio. Bush no se ha dado ni cuenta de que el ALBA respira. El idiota no sabe que los demás lo ven. Persigue al hombre de su vida (si no existiera Bush lo inventaría) por toda América Latina, y luego dice que aquél lo anda buscando. Monta un show de bostezos y de insultos en un pequeño estadio de un barrio bonaerense y luego va a dormir en el Sheraton Hotel. Prédica y conducta por distintos rumbos.

El idiota no tiene identidad política. En Argentina se proclamó hijo de Bolívar, de San Martín, de Tupac Amaru, del Ché Guevara y de Perón. Cuando visita Cuba es hijo de Martí. En Nicaragua es hijo de Sandino. En Perú, de Velasco. En la China, de Mao. Esa mezcla de padres tan disímiles tal vez sea responsable del desorden ideológico que el pobre idiota carga entre verruga y ceja. El idiota prefiere lo parejo. Le tiene miedo a la diversidad.

Por eso quiere un partido único donde todos complazcan sus caprichos. Y un pensamiento único que evite la comezón de la disidencia. Y un líder único y eterno, cuyo dedo decida el rumbo el país.